sábado, 26 de febrero de 2011

Se inaugurará el próximo 3 de marzo en la Galería La Casona importante exposición de la pintora Rachel Valdés



El próximo 3 de marzo la joven pintora cubana Rachel Valdés presenta su primera muestra personal en la Galería La Casona de La Habana, Cuba. ‘Sweet life’ es el título de la exposición.
Según la autorizada opinión de JUDITH PASTOR, de Barcelona,ESPAÑA:

"Con un cierto imaginario ero-porno, Rachel Valdés se apropia de la iconografía de la publicidad y los códigos del consumo para mostrarnos una utopía basada en el placer y el deseo. Su intención es poseer al otro, entrar en el otro, tanto en el espacio físico como en el figurado
La muestra está integrada por alrededor de doce cuadros de gran formato en óleo sobre lienzo que desprenden una sensualidad desbordada y desprejuiciada. Estableciendo una similitud entre el placer erótico y el placer pictórico, Rachel Valdes explica: “Me interesa asumir el cuadro como un objeto de deseo; como centro de atención haciendo alusión a su propia condición de mercancía para llevar y colgar

La artista trata de obtener a través de la pintura un resultado sensorial visual técnico y pictórico, ”Me gusta experimentar la sensación de cambios de personalidad, es atrayente el modo en que te puedes convertir en otra cosa, asumir ese personaje y representarlo en una instantánea y dejar esa imagen por muy artificial que sea. De repente convertirme un animal o maquina sexual, con objetos que insinúen circunstancias diferentes a la que aparenta o son realmente”


Por otra parte, la propia Rachel ha expresado al hablar de su obra:

El interés por lo sexual en mi trabajo lo presento como un motivo para hacer reflexionar sobre la condición de nuestro cuerpo. Estableciendo una similitud entre el placer erótico y el placer pictórico. Me interesa asumir el cuadro como un objeto de deseo;como centro de atención haciendo alusión a su propia condición de mercancía para llevar y colgar.
Me gusta experimentar la sensación de cambios de personalidad, es atrayente el modo

en que te puedes convertir en otra cosa, asumir ese personaje y representarlo en una

instantánea y dejar esa imagen por muy artificial que sea. De repente convertirme un

animal o maquina sexual, con objetos que insinúen circunstancias diferentes a la que

aparenta o son realmente. A través de la pintura trato de obtener un resultado sensorial visual técnico y pictórico que es lo que me seduce a la hora de trabajar.


Nadie que este atento al desarrolo de las artes plásticas de Cuba debe dejar de ver esta exposición que se mantendrá abierta al público hasta el 23 de marzo de 2011.

martes, 22 de febrero de 2011

La Patrona de Cuba se hace sentir en la Feria del Libro


El pasado 14 de febrero, con notable asistencia de público y un ambiente de acontecimiento trascendental para la cultura cubana, se presentó por primera vez en Cuba el libro Yo soy la Virgen de La Caridad, del cardenense Ernesto Álvarez Blanco.

La presentación estuvo a cargo de la Licenciada en Letras Lourdes Díaz y de la arquitecta Lourdes Moreno, esta última en representación de las empresas extranjeras Theo Havana Collections y Praedium Desarrollos Urbanos, piezas claves en la materialización del proyecto. De esta manera la actual Feria del Libro de La Habana se suma a las celebraciones por el 400 aniversario del hallazgo de la imagen de la Virgen de la Caridad del cobre, Patrona de Cuba.

Con una cuidada edición, a cargo de la editorial barcelonesa RBA Libros, el texto pone en manos de investigadores y devotos cubanos un valioso documento que se creía perdido irremediablemente. Se trata de los “Autos de 1688, ordenados por el juez oficial y provisor y vicario de Santiago de Cuba”, doctor Roque de Castro y Machado, el cual constituye la oficialización, por parte de la Iglesia Católica, del culto a la referida virgen, el cual ya existía de manera visible en el Santiago de Cuba de la época.

Según Álvarez Blanco, el documento, encontrado en el Archivo General de indias de Sevilla hace dos años, había sido buscado sin éxito por investigadores de la talla del antropólogo cubano Fernando Ortiz, y hasta donde se conoce nunca antes había sido publicado de manera íntegra. Además, su relevancia histórica está dada por el hecho de que fue la primera vez en la historia de Cuba que el testimonio de un esclavo (el entonces niño Juan Moreno) tiene carácter legal.

El volumen incluye también un grupo de materiales relacionados con este importante icono de la cultura cubana, entre ellos, una leyenda popular sobre cómo la virgen “morena, criolla y mambisa” se convirtió en Ochún, diosa africana del amor, la miel, el río y todas las cosas dulces.

Ernesto Álvarez Blanco es museólogo e Historiador de la Ciudad de Cárdenas. Su amplia labor investigativa ha sido publicada en Cuba y España. Actualmente es el webmaster de El Cardenense, un blog enfocado hacia la actualidad política y cultural de Matanzas y Cuba.

Tomado de: http://feriadellibro.cubaliteraria.cu/noticia.php?idnoticia=328

martes, 15 de febrero de 2011

Palabras pronunciadas por la filóloga Lourdes Díaz Rodríguez en el acto de presentación del libro “Yo soy la Virgen de la Caridad”.



Palabras pronunciadas por la filóloga Lourdes Díaz Rodríguez en el acto de presentación del libro “Yo soy la Virgen de la Caridad” del destacado museólogo e historiador cubano Ernesto Álvarez Blanco, efectuado poco después de las 3:00 pm del lunes 14 de febrero de 2011 en la sala José Lezama Lima (antigua Capilla) de la fortaleza habanera de La Cabaña, sede principal de la XX Feria Internacional del Libro de La Habana.

Buenas tardes:

Lamentablemente, el presbítero y Dr. En Historia del Arte, Dr. Jaume Aymar y Ragolta, presidente de la Fundación Catalunya – América San Jerónimo de la Murtra, Director de Radio Estel y del semanario Cataluña Cristiana y profesor de la Facultad de Filosofía de la Universidad Ramón Llul de Barcelona, que hubiera sido, a nuestro modesto entender, por sus conocimientos sobre las apariciones en Hispanoamérica de vírgenes negras o morenas y por los estrechos vínculos intelectuales que lo unen al autor, la persona más indicada para presentar este libro, no pudo estar presente esta tarde con nosotros. Sin embargo, tendremos el placer de leer a continuación, unas breves y emotivas palabras escritas por él para introducir este volumen.

“Me complace presentar este nuevo libro del museólogo Ernesto Álvarez Blanco al que me unen lazos de amistad y a quien profeso una sincera admiración por su labor de historiador vocacional y de investigador competente. Gracias a sus pesquisas en el Archivo General de Indias ha podido localizar, transcribir y comentar un valioso legajo sobre los orígenes de una advocación tan entrañable para los cubanos como es la Virgen de la Caridad del Cobre. Es el respaldo documental de una peculiar manifestación de la Virgen María del año 1612 merced a una talla flotante que se apareció sobre la espuma, a dos rancheadores indígenas Juan y Rodrigo Hoyos, y a un niño esclavo de diez años, Juan Moreno, llamados popularmente “los tres juanes”. No se trata de una aparición propiamente dicha, pero sí que es una Virgen hallada o como algunos dicen significativamente, en mi país, una Virgen que se hace la encontradiza. La declaración de Juan Moreno, setenta y cinco años después de los hechos, tiene la frescura y el sabor de lo primigenio. Nos hace pensar en el Nican Mopohua, el relato de las apariciones de la Virgen de Guadalupe y sus tiernos y emotivos diálogos con el indio Juan Diego, hoy santo. Una vez más en Cuba se cumplían las palabras del evangelio a través de las cuales Jesús agradece a su Padre el haber ocultado a los sabios y entendidos lo que ha revelado a la gente sencilla. Como en Lourdes, como en Fátima, María se revelaba también a un niño. La frase “Yo soy la Virgen de la Caridad” inscrita en la tablilla nos hace pensar en el “Yo soy la Inmaculada Concepción” que dijo en bigurdán, una variedad del gascón, la Virgen a Bernadette en Lourdes, casi doscientos cincuenta años después, en 1858.

También en España se encuentran relatos similares al de la Virgen de la Caridad del Cobre, aunque sin la popularidad ni el arraigo que este mantiene. Según una piadosa leyenda, a mediados del siglo XVII aparecieron en la playa de Calonge (Catalunya) una talla del Santo Cristo y otra de Nuestra Señora del Rosario que, al parecer habían sido arrojadas allí por las olas. No debía ser infrecuente que imágenes de madera fuesen lanzadas por bajeles al mar quien sabe si para aplacar las tempestades, siguiendo al salmista que dice de Dios «aplaca el furor de los mares / y el estrépito de las olas».


La Virgen de la Caridad del Cobre, patrona principal de Cuba, es venerada en mi Barcelona natal en la capilla que las religiosas Escolapias tienen en la céntrica calle de Aragón. Allí la colonia cubana residente en la Ciudad Condal se reúne cada año para implorar gracias de su celestial protectora. Deseo que la lectura de estas páginas aumente el conocimiento de esa entrañable advocación e intensifique los fecundos vínculos entre nuestras culturas.

Dr. Jaume Aymar Ragolta, Pbro.
Fundación Cataluña-América San Jerónima de la Murtra

Solo queremos agregar a las acertadas valoraciones del Dr. Aymar y Ragolta el agradecimiento del autor, y estoy segura de todos aquellos que podrán, dentro de breves momentos, adquirir este libro, a la prestigiosa Casa Editorial española RBA EDICIONES que con el soporte y la imprescindible colaboración de la empresa barcelonesa Praedium Desarrollos Urbano SL y la Fundación Habana Theo Collections, hicieron posible devolver íntegramente al patrimonio de la nación cubana, a menos de 2 años de que se conmemore el 400 aniversario del hallazgo de la imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre: el excepcional documento que dio origen al volumen que hoy presentamos: los Autos de 1688, ordenados por el juez oficial y provisor y vicario de Santiago de Cuba, doctor Roque de Castro y Machado, a instancia del monarca y que formó el cura beneficiado de la parroquial de las minas de Santiago del Prado, Juan Ortiz Montejo de la Cámara ante el notario mayor de aquel juzgado, alférez Antonio González Villarroel.
Además, debemos destacar la colaboración brindada por el Dr. Alfonso Cirera Santasusana, un enamorado de Cuba, de su historia, su cultura y su gente, quien es Presidente de Praedium Desarrollos Urbano SL y de la Fundación Theo Habana Collections, para que el autor pudiera trabajar en el 2008 bajo el patrocinio de estas instituciones y durante varias semanas en el Archivo General de Indias de Sevilla y sobre todo, para que este libro se hiciera realidad; de Don Ricardo Rodrigo, Presidente de RBA Ediciones que se enamoró de la idea cuando este texto era solo un proyecto de investigación y de Maite Ciruela y Maite Colom, editora y correctora, respectivamente del libro.
Por último, queremos resaltar la colaboración de María del Carmen Remigio Vicepresidenta del Instituto Cubano del Libro y de Edel Morales, Director del Centro Cultural Dulce María Loynaz, quien esta a cargo del Programa Literario de la XX Feria Internacional del Libro de La Habana, que hicieron lo posible e imposible para que este libro pudiera ser presentado en este, el más importante evento literario cubano. Igual agradecimiento debemos a las Sras. Montse Figueras y Reyes Cirera, de Praedium Desarrollos Urbano SL y a la Máster y Arquitecta. Lourdes Moreno Santos, Gerente de Sereníssima Inmobiliaria S.A, quienes gestionaron y supervisaron desde Barcelona y La Habana, respectivamente, los detalles del traslado a Cuba del libro y de su presentación, en el día de hoy, en esta Feria.
A todos ellos, el agradecimiento del autor y de seguro, de todos cuanto tengan la oportunidad de adquirir y leer este libro, que cautivará por igual, tanto a quienes adoran - dentro y fuera de las fronteras de la Isla - a la Caridad del Cobre como a quienes reconocen en esta Virgen morena, criolla y mambisa, un indiscutible símbolo de cubanía.
Muchas gracias!.


"De amar las glorias pasadas se sacan fuerzas para adquirir las glorias

nuevas".

José Martí



“… la HISTORIA NOS AYUDARÁ A DESCUBRIR LOS CAMINOS DE HOY Y DE MAÑANA, A MARCHAR POR ELLOS CON PASO FIRME Y CORAZON SERENO Y A MANTENER EN ALTO LA ESPERANZA (...)”.

RAMIRO GUERRA