lunes, 9 de diciembre de 2019

Médicos cardenenses.

Por: MsC Lorena Martínez Faxas
A Malena, por estar durante ¡tantos años! velando nuestra salud, a Leonor ya retirada, a Chachi nuestra enfermera y a la actual médica de familia de mi Consultorio, esa muchacha inteligente y amable cuyo nombre vergonzosamente no me sé El 3 de diciembre los cubanos celebramos el Día de la Medicina Latinoamericana, como homenaje a Carlos J. Finlay, el médico cubano que descubrió el agente trasmisor de la fiebre amarilla. Para todos y todas los amigos (as) que estudiaron esa humana carrera, para los doctores que me han ayudado en innumerables ocasiones este trabajo que quiere recordar algunos detalles dela historia de su profesión en nuestra ciudad. No sabemos mucho de behíques, médicos o hechiceros que vivieran entre los aborígenes primeros dueños de nuestras cavernas y costas, pero creo poder afirmar que, a pesar de ello, en materia de ciencias para la salud, los cardenenses atesoran una rica historia y exhiben instituciones que forman parte del patrimonio nacional. La ciudad fue cuna de numerosas figuras médicas que se distinguieron como especialistas, profesores universitarios y autoridades sanitarias. Prueba de esto es que a ocho años de fundada, en 1836, el Dr. Francisco Barrinat instaló en Cárdenas la primera farmacia que ofrece servicio a la población. Dicha botica fue nombrada San Juan de Dios, y estaba situada en la calle Real esquina a Obispo. La inauguración del Hospital de caridad Santa Isabel, teniendo por principales benefactores a Gertrudis Gómez de Avellaneda y su esposo, el coronel Domingo Verdugo, fue una de las más notorias actividades realizadas durante los festejos vinculados a la develación de la estatua de C. Colón, en 1862. Tres años después, (1865) llega a Cárdenas un enviado del Emperador Napoleón III, el doctor Dumont, quien investigaba alrededor de la fiebre amarilla. Fue ayudado por los doctores locales Alejandro C. Biart Beauregard, Miguel Bravo Senties y Dionisio J. Sáez. Este último, fue uno de los galenos independentistas locales. Deportado por sus actividades conspirativas, a Fernando Poo, en marzo de 1869, logró escapar de prisión y se refugia en Cayo Hueso, Estados Unidos, no regresando a la ciudad hasta después del Zanjón. En 1872 llega a Cárdenas uno de los personajes más renombrados de su historia Cham Bom- biá, el médico chino. Habitó en una casa de la Sexta avenida, casi esquina a calle 12 (actualmente Vives entre Coronel Verdugo e Industria), junto al antiguo Cuartel de Bomberos. Era un especial. Un Robín Hood de ojos rajados quien cobraba honorarios a los ricos mientras que a los pobres no. Utilizaba yerbas, cocimientos y métodos típicos de la medicina oriental en sus tratamientos con gran éxito. Amaneció muerto una mañana en su casa en circunstancias que nunca fueron aclaradas. De él y sus maravillosas curaciones nació esa cubanísima frase popular que aún perdura: “no lo salva ni el médico chino”. El 5 de diciembre de 1881 se reúnen los médicos y farmacéuticos cardenenses para constituir una Asociación de Socorros Mutuos, el 25 de diciembre del mismo año después de discutir el reglamento y aprobarlo, acordaron enviarlo al Gobierno de la provincia para su aprobación y seleccionaron su primera directiva. No es hasta el 7 de enero de 1882 que queda oficialmente constituido, convirtiéndose en el primer Centro Médico Farmacéutico de Cuba. Su presidente no fue otro que el viejo conspirador el doctor Dionisos José Sáez, aunque otras fuentes afirman que el presidente electo fue Frank Martínez Armas, algo que no pudimos dilucidar para este trabajo. El secretario si fue otro reconocido doctor local Alejandro Neyra Rangel, delegado del Partido Revolucionario Cubano en el territorio cardenense, quien fundara el diario Crónica Liberal y fuera jefe local de sanidad. Esta fundación del Colegio Médico de Cárdenas hizo historia dentro del campo de la Medicina en Cuba por su importancia, era la primera vez que se agrupaban los profesionales de la medicina de una ciudad o territorio, además de los aportes científicos que hicieron sus miembros. En el Colegio estuvieron representados la mayoría de los médicos más importantes de la ciudad, como: Juan de Dios Rivero, Francisco Smith Gasparini, Alberto Gutiérrez, Rojas, Francisco Oti de la Fe, Tomás Ubieta, Félix Burés Molina, Miguel Ángel Iglesias Vasallo, Omar E. Vega (médico forense), Ramiro Pérez Maribona, Pedro J. Sierra, Francisco Cabral Miembros de dicha institución fueron personalidades de la salud como En medicina y ciencias, Los Doctores Leopoldo Horrego, Medardo Vitier, Los hermanos Domingo y Fernando Mendez Capote, el eminente Dr. Tomas Yanes, Fernando Betancourt Godoy, Hnos. Díaz Arguelles y Carlos Deschapelles Menocal. El 25 de noviembre de 1894 se inauguró en la ciudad la primera clínica ginecológica cubana. Su fundador, el Dr. Fernando Méndez Capote, perteneció al grupo de los estudiantes de Medicina implicados en los sucesos del 27 de noviembre de 1871 y a su vez fue el más longevo de los sobrevivientes de este brutal hecho. Desterrado a España luego de seis meses de pena en Cuba, acabó sus estudios en aquel país regresando a Cuba en 1880. Especializado en ginecología, el doctor Fernando además de atender su Clínica privada es médico en el Hospital “Santa Isabel”, del que llegó a ser director y primer cirujano, además de costear la clínica quirúrgica de dicho hospital. Participó en la creación del referido Colegio Médico local y tuvo una activa participación en las conspiraciones independentistas cubanas. Ya en la República fue representante a la Cámara y le fue otorgado el grado de Comandante del Ejército Libertador. Muere pobre en La Habana el 30 de junio de 1947. La Clínica, desde 1890, estuvo instalada inicialmente en la calle de Salud, entre Laborde y Jenez, pero fue oficialmente inaugurada el 25 de noviembre de 1894. Desde sus inicios tuvo su Reglamento de actuación, normas y otros documentos oficiales. Su anestesista fue F. Barrinat el farmacéutico de la botica de San Juan. Además en ella trabajaban como médico jefe Enrique Sáez Bringuier, ayudante José M. Verdeja y como practicante, Manuel Álvarez. En 1893, la Clínica se traslada a Coronel Verdugo No. 30 (E) entre Laborde y Jenez. Ya para ese entonces poseía un cuarto de recuperación posoperatorio y un cuarto de asepsia. Fue considerada como: “… un buen centro ginecológico el cual está al nivel de las clínicas adelantadas en Europa…” Nace la República en 1902 y muchos médicos radicados en la ciudad de Cárdenas se desvinculan de su profesión para asumir una carrera política. Tal es el caso Domingo y Fernando Méndez Capote Alejandro Neyra Rangel, Alberto de Rojas, Enrique Sáez y otros. El hospital de caridad pública Santa Isabel, aun se mantenía en 1919 como única institución hospitalaria pública gratuita, de ahí el interés del Dr. Fernando Méndez Capote, Secretario de Sanidad local de ampliar sus salas dotarlo con un pabellón de cirugía y mejores condiciones para pacientes, acompañantes y personal de salud. De la tradición iniciada por el antiguo Colegio de Médicos del pasado siglo nace la idea de colegiarse y unificarse en las condiciones de la nueva república. Los profesionales de la salud locales se reúnen el 19 de diciembre de 1925. En enero del próximo año ya dejan constituido el nuevo Colegio Médico Municipal y eligen su directiva. Esta institución cardenense contaba con 50 miembros debidamente certificados por la Escuela de Medicina de la Universidad de la Habana, muchos de los cuales habían recibido entrenamiento en especialidades en la Habana o en el extranjero. Supervisaba el cumplimiento de las reglas de ética y la calidad profesional de sus miembros. Contaban con una nutrida y actualizada biblioteca a la disposición de sus miembros además de facilidades para conferencias y reuniones científicas. También ofrecían, periódicamente, cursos de posgraduado y seminarios con conferencistas locales e invitados. A finales de la década del cincuenta el Colegio contaba con 54 miembros. En el listado aparecían la médica Aurora Elena Bacot, junto a la señorita Muñiz, fueron las dos primeras doctoras que tuvo Cárdenas. El primer presidente de esta nueva etapa de la institución fue el Dr. Enrique Sáez, coronel de nuestras guerras independentistas y amigo del Dr. Fermín Valdés Domínguez. Juntos trabajaron en la creación de hospitales de sangre durante la guerra de 1895 en la Ciénaga de Zapata. Sáez además, fue miembro de la Delegación de Veteranos de la Independencia y de la Brigada de Cárdenas. Fue el primer radiólogo cardenense. Falleció en 1948 El secretario el Dr. Ramiro Pérez Maribona, primer médico residente del barrio de Varadero en 1933), el vicepresidente Dr. Francisco Oti (fundador de la Clínica La Caridad, en Cárdenas, situada en la calle Céspedes no. 560) y su tesorero, Juan de Rojas fueron los protagonistas de la Asamblea Nacional de la Escuela Médica Cubana, evento llevado a cabo en la ciudad en enero de 1934, en el cual se defendieran propuestas de mejoras para el personal sanitario público. Allí se tomaron importantes acuerdos en beneficio de los trabajadores de la salud. El delegado cardenense a la cita fue el Dr. Julio Miguel Arístegui Villamil, conocido como el “médico de los pobres”, quien había nacido en la ciudad el 15 de julio de 1905, en la calle Obispo 52 entre Calvo y Ruiz. Entre Cárdenas y Matanzas estudia las primeras letras y se gradúa de bachiller. En la Universidad se incorpora a la lucha por la reforma universitaria. Es compañero de estudios de José Elías Borges Cabrera y conoce a Julio Antonio Mella y a Rubén Martínez Villena. Terminas sus estudios de medicina, en la Universidad de La Habana, el 5 de julio del año 1929. En el año 1931 abre su gabinete en su casa natal. A su llegada choca con la realidad de la clase obrera más humilde, la insalubridad . Abre las puertas de su modesto consultorio a todos. En 1932 integra la Izquierda Médica, dentro de la Federación Médica de Cuba. Reinstala su consultorio, en 1934, en un lugar más céntrico: la avenida Céspedes 468, entre Obispo e Industria. Además, obtiene una plaza de médico en la Casa de Socorro. Lleva una activa labor política y social. Participa en la huelga que derroca a Gerardo Machado en 1933 y en la preparación del Segundo Congreso del Partido Comunista de Cuba (1934). Publica en 1935 numerosos artículos donde critica la mercantilización de la medicina. El Tribunal de Urgencias de Matanzas le juzga por tenencia de literatura marxista y subversiva. Logra salir absuelto. Es designado redactor de la revista Medicina de hoy (1936). Encabeza el Comité cardenense para defender la República española, y pro amnistía de los presos políticos que llenan las cárceles. Vuelve a ser juzgado. Esta vez no logra escapar y guarda prisión en el Castillo del Príncipe, en La Habana. Electo Presidente del Comité Municipal del Partido Unión Revolucionaria Comunista, y en su representación se postula como candidato a la Alcaldía en las elecciones de 1940. Pierde ante otro galeno. En 1948 vuelve a ser condenado a prisión. Obtiene libertad bajo fianza y en enero de 1949 es absuelto por el tribunal de instrucción de Matanzas. Fallece el 16 de febrero de 1950. El sepelio del dirigente, querido y respetado, constituyó una impresionante manifestación de duelo popular. Enrique Sáez Díaz el médico ante quien Aristegui perdiera las elecciones fue un alcalde cabal, que hizo mucho por el saneamiento del tesoro y administrativo de la localidad, además de por la salubridad y la medicina local y otras obras de bien público. Organizó servicios médicos para los pobres y se reparó la ambulancia municipal, equipándola de gomas nuevas y reparándola totalmente en su parte mecánica y dotándola de bien surtido botiquín. Diseñó un sistema de recetas a pobres que eran despachadas en cualquier farmacia de la ciudad, aumentándose el presupuesto para esas atenciones Había nacido en 1904 y se graduó de cirujano en 1930. Retornó a su ciudad natal a formar parte del cuerpo facultativo de la Clínica Cárdenas del que nunca se separó a pesar de su carrera política. Fue médico de sanidad, médico biológico y Jefe del Servicio Médico Municipal en el año 1934. Luchó contra Machado y fue candidato a la Asamblea Constituyente. El 7 de Mayo de 1957 se inaugura el nuevo hospital de Cárdenas, situado en las afueras de la ciudad. Actualmente lleva el nombre del médico cardenense Julio Miguel Aristegui Villamil El primero de enero de 1959, la Dirección del Movimiento 26 de Julio se reunió en el Colegio Médico de Cárdenas, acordando algunas medidas para tomar el poder de la ciudad, sus instituciones militares y civiles. Pronto el país cambiaba y la salud pública cardenense con él. La iniciadora de la primera colaboración médica internacionalista Sara Perelló nació el 15 de abril de 1920 en Cárdenas; en 1963, ya graduada como especialista en Pediatría, decidió partir a prestar sus servicios a la recién liberada República de Argelia. El 17 de julio de 1987 se realiza el primer trasplante exitoso de hígado en Cuba al cardenense Antonio López Isla, hecho que constituyó un logro más de la medicina cubana. El Programa del Médico y Enfermera de la Familia se inició a finales de 1988. De forma paralela, los médicos fundadores del modelo comenzaron los estudios del primer año de la residencia de Medicina General Integral (MGI), y en 1991 constituyeron la primera graduación de especialistas de primer grado en MGI, de Cárdenas. El 19 de septiembre de 2002, se inaugura en el edificio de la antigua Escuela Llaca el primer Centro de Rehabilitación del Neurodesarrollo del país. De esta manera, con una primicia diferente, cierra este homenaje, quizás algo atrasado, pero sincero y necesario a los médicos, enfermeras y personal sanitario cardenenses, esos que velan de múltiples formas por nosotros y que tanto trabajo nos cuesta, a veces, reconocer su labor. Bibliografía: Colectivo de autoras: Breve historia de la fundación de la medicina familiar en Cárdenas. Policlínico Universitario “Héroes del Moncada”. Matanzas, Cuba. Documento digital. Colectivo de autores: Julio Aristegui Villamil: el médico de los pobres. Hospital municipal Cárdenas. Documento digital. Colectivo de autores: Documentación al Software historia de la medicina en Cárdenas. Para Primer Congreso Virtual de Ciencias Morfológicas, de la Cátedra Santiago Ramón y Cajal. Documento digital ECURED (Holguín portable) Enrique Sáez Diez Argüelles. ECURED (Holguín Portable) Fernando Méndez Capote López, J: Esquema factográficos de klas primicias médicas cubanas. En Revista Cubana de Información en Ciencias de la Salud acimed@infomed.sld.cu Pino Fernando, M.D: 100 Años de Historia de la Medicina en Cárdenas, 1860-1960. Documento Digital. Sáez Argüelles E. Reseña Histórica de la medicina en Cárdenas. Archivos de la Clínica Cárdenas, S.A. Cárdenas: Órgano de Divulgación Científica; 1952. Vega J y Mirabal D.: Fundación de la primera clínica ginecológica en Cuba. En Revista Cubana de Obstetricia y Ginecología. 2015; 41 (2):106-111 http://scielo.sld.cu Vega, J.: Breve reseña histórica del Colegio Médico de Cárdenas. Matanzas, Cuba. En Revista Médica Electrón [Internet]. 2012 Nov-Dic Disponible en: http://www.revmatanzas.sld.cu/revista%20medica/ano%202012/vol6%202012/tema12.htm


"De amar las glorias pasadas se sacan fuerzas para adquirir las glorias

nuevas".

José Martí



“… la HISTORIA NOS AYUDARÁ A DESCUBRIR LOS CAMINOS DE HOY Y DE MAÑANA, A MARCHAR POR ELLOS CON PASO FIRME Y CORAZON SERENO Y A MANTENER EN ALTO LA ESPERANZA (...)”.

RAMIRO GUERRA