lunes, 25 de noviembre de 2019

Son para ti.

Por: MsC Lorena Martínez / MsC Luis Alberto Pérez y Lic. Jennysleidy Torres Ramírez. La Casa de Cultura Gonzalo Roig de Cárdenas, cumplió el pasado 28 de septiembre cincuenta años de trabajo artístico comunitario y en bien de la cultura popular tradicional. La calidad y continuidad de su trabajo descansa, entre otros elementos, en su comunicación y en los valores sobre los que descansa su quehacer.
Fundadas en 1978, las Casas de Cultura son instituciones de perfil socio cultural, que han desarrollado una labor comunitaria intensa, cotidiana y, sobre todo, anónima, dejando huellas en el acervo cultural nacional. Su objeto social es la atención al Movimiento de Artistas Aficionados y a los procesos de apreciación estética participativa comunitarios. Desarrollan desde sí y en interacción con otras instituciones la promoción, apreciación y creación del arte y la literatura contribuyendo al enriquecimiento espiritual de las comunidades, así como a la salvaguarda de la cultura popular tradicional La Casa de Cultura Gonzalo Roig de Cárdenas cumple desde hace ya 50 años esta misión siendo desde los años sesenta del pasado siglo, centro promotor del Movimiento de Artistas Aficionados, de extensión cultural y de atención constante y priorizada a la comunidad del territorio, tanto urbana como rural. Está situada en en la antigua Logia Perseverancia, inmueble sito en la céntrica calle Real (Céspedes), que existe desde principios del pasado siglo, representativo del neoclásico propio de la ciudad. Se identifica por los colores amarillo y azul con una imponente fachada aún elegante y orgullosa. Al ser nacionalizada dicha logia es entregada al Consejo Nacional de Cultura, quien la convierte primeramente en Sala de Conciertos y luego en Casa de Cultura (1969). Se nombra desde entonces Gonzalo Roig. En su planta baja se encuentran la recepción, galería de arte, aulas de música (2), salón de actividades, pasillo lateral, oficina biblioteca, patio exterior, terraza, pequeño almacén, baños y patios interiores. La planta alta tiene diferentes niveles constructivos y áreas en desuso, incluyendo la terraza miradora a la que se accede por una escalera de caracol. Diez años después, al crearse el Sistema de Casas de Cultura (1978) la instalación contaba con un taller de danza, cuatro oficinas, dos baños, un almacén, y un salón con 120 lunetas, de madera preciosa, las que lamentablemente no resistieron los embates. de uso y el tiempo. Aquella era una época de auge cultural. Se fundaron en la ciudad un Centro de Artes Plásticas y otro de Música, los cuales sobrevivieron hasta los primeros años de este siglo. Se trabajó con la cultura popular tradicional, y/o tradiciones campesinas, círculos de amigos de diferentes modalidades. Laboraron en círculos infantiles, escuelas del partido, aulas talleres, granjas de rehabilitación, campamentos agrícolas, campamentos de la escuela al campo. Fortalecieron su posición comunitaria. Durante el Período Especial de los noventa mantuvo su trabajo permitiendo a la comunidad opciones culturales. En la nueva centuria, acentúa la Casa su papel comunitario, se imparten talleres, profundiza el trabajo con niños y adolescentes, se vincula aun más a otras instituciones culturales. Sus aficionados aparecen en espectáculos artísticos, políticos-culturales o en proyectos artísticos, centros de trabajo, tribunas, actos y otras instituciones, así como en actividades de envergadura local, provincial y nacional, además de festivales a todos los niveles. La Casa ha sido espacio permanente para las peñas del tango, son, feeling, danzón, rumba, bolero y rock entre otras manifestaciones culturales. Son atendidas y asesoradas uunidades artísticas de sectores como CTC, CDR, ANAP, FEEM, FEU y otras. Atiende a programas especiales en sectores como Consejería SIDA, ANCI, ACLIFIM, ANSOC, organizaciones que luchan contra las drogas, el alcoholismo, la atención al adulto mayor y a la Unidad Militar 1410 del Ejercito Central, radicada en las afueras de la localidad. Durante el actual siglo identifican su trabajo la preocupación constante por sus modos de comunicar, sus públicos internos, afianzamiento y personalización de su imagen e identidad, el trabajo gráfico y diseño de sus promociones en campañas y de manera inteligente y su contribución a desarrollo de proyectos socioculturales desde las direcciones estratégicas de trabajo sociocultural comunitario con un alto protagonismo. Los valores de sus trabajadores y una comunicación estable y enriquecida juegan un importante rol en los logros alcanzados por la institución. Ello fue comprobado mediante una investigación en ambos elementos que incluyó encuestas, observación y análisis de los documentos de la institución, cuestión no muy difícil dado que los autores son arte del colectivo de la misma. En la institución trabajan 50 personas, con un equilibrio etario adecuado, entre los adultos mayores, algunos tienen más de treinta años de servicio en la institución/sistema de casas de cultura quienes brindan su experiencia a los jóvenes. Existe también un balance en cuanto al nivel educacional: 30 personas graduadas de nivel medio/medio superior, dieciocho universitarios, uno termina este curso la UMCC y el nivel de uno de ellos es primario. Los datos reflejan a una muestra diversificada entre las diferentes áreas de trabajo, reflejando un sujeto tipo femenino, de nivel medio superior, con alto sentido de pertenencia a la institución, ganas de hacer, aunque domine en ellos la rutina, para quienes los valores son vitales. En cuanto a la comunicación este trabajo inicia identificando los públicos institucionales conformados para su estudio en internos (trabajadores, directivos y técnicos); mixtos (aficionados, brigada de instructores de arte José Martí, padres de los niños/as), y externos, entendiendo a estos últimos como las restantes instituciones culturales del municipio incluyendo la dirección municipal, las escuelas primarias, de enseñanza media y universitarias del municipio, asociaciones, barrios y otras). Estos últimos, de acuerdo a las más actuales clasificaciones se conceptúan como públicos estratégicos. La comunicación interna en la entidad es buena, casi muy buna me atrevería a decir. La estudiante de Comunicación Social, Alina García Martínez, ex/aficionada de la Casa expresaba en un alrededor del curso 2015//2016 que la misma asumía los siguientes parámetros: • Coherencia entre los públicos internos • Buena comunicación horizontal de la dirección hacia los trabajadores, aficionados y técnicos, que fluye en todos los niveles y sentidos, poco común entre este tipo de instituciones. • Identificación con su centro laboral y conocimiento de sus tareas. • Opiniones, inquietudes y sugerencias de los subordinados se escuchan y aplican, o sea, que la dirección está al tanto de lo que ocurre en el colectivo. • Los mensajes son esencialmente de tarea, control, reconocimiento y de relaciones humanas con un balance adecuado. • Los principales canales de comunicación interna son las reuniones y, sobre todo, conversaciones, encuentros informales. • Ambiente laboral agradable y positivo, aunque, a veces, lo rutinario hace su aparición. • Optima relación entre empleados y directivos. Confianza y transparencia • Directora paradigma de compromiso con el trabajo y la institución • Horario flexible acorde a las tareas asignadas. • Única institución de su tipo en su tipo que tiene cuño, logotipo, trabajo gráfico personalizado, que realiza campañas de promoción, carteles, spots radiales y televisivos, que posee un grupo de trabajadores para encargarse, al margen de sus tareas habituales, a la imagen y diseño gráfico de la Casa. • Conocimiento del rol e importancia de la comunicación social. Para este 2019 a ellos se suman: • Aumento de la comunicación trasversal, sin perder importancia la horizontalidad • Se mantiene la dirección y la mayor parte de sus trabajadores y técnicos. Concienciación de los trabajadores y directivos con respecto a las ventajas y posibilidades del centro. Mayor pertenencia y compromiso con el mismo. • Imagen e identidad propias y fuertemente enraizadas • Cada vez priman más los mensajes humanos • No existen rumores ni comunicación “de pasillo” • Distribución individualizada de los tiempos de trabajos, aunque seguida por la Administración y Dirección. Mayor nivel de rutina, apatía y desidia • Muy pocos, si acaso algún recién llegado, trata de crear columnas particulares de auto/desarrollo, que son desarticulados por la dirección y el propio colectivo. • Los trabajadores prefieren las conversaciones y encuentros informales para la comunicación, aunque se está necesitando de niveles mayores de socialización en el colectivo, aunque en general están conformes con el grado de información. • Se sienten identificados con la Casa de Cultura y su quehacer. • Se sienten muy gratificados con la comunicación con sus jefes que se mantienen, en general, al mismo nivel que ellos. • Con la subida de salarios decretada por el nuevo Gobierno Cubano todos y todas fueron beneficiados con lo que al fin mejora no de los problemas que más afectaba al trabajo y permanencia de técnicos en la institución el poco salario que devengaban anteriormente. • En general la Casa de Cultura es un lugar agradable y más luego de las reparaciones, con problemas logísticos pero que brinda apoyo, confianza en ella se sienten comprometidos al trabajo de la entidad. En ella se consideran más amigos que compañeros de trabajo, otra familia mayor en la que confiar. De acuerdo a las respuestas obtenidas, para los directivos los temas predominantes son de relaciones humanas, personales (4), junto a la orientación de tareas, reconocimientos y/o críticas, quejas, sugerencias… Consideran que la información llega, a los trabajadores, esencialmente mediante conversaciones con los directivos, aunque si etas son de carácter muy general o normativas se utilizan las reuniones y los murales como recordatorios de lo acordado. Ellas piensan que la comunicación, buena, existente parte de lo intuitivo, de las acciones y modos de hacer de la casa de Cultura puesto que ni el propio municipio tiene directrices concretas al respecto lo que ayuda a la entidad es existir graduados de comunicación Social (hasta una master) lo cual ayuda en estos temas. Las funciones de la comunicación son esencialmente informativas, divulgativas, movilizativas y de cohesión de los públicos y sus trabajadores están plenamente involucrados con el trabajo, motivados y se transita hacia una mayor transversalidad y horizontalidad de la misma. Aun en decisiones de esas “indiscutibles”, se les explica a los trabajadores, se les explica y oímos lo que ellos plantean. En las restantes decisiones se reúne el colectivo completo o por Cátedra, se comparten las opiniones y participativamente se vuelven a conversar hasta llegar a las decisiones colectivas, para eso se utilizan los talleres de programación, reuniones, asambleas y otras. A todas ellas vamos con un determinado consenso obtenido a partir del diálogo, esta misma manera la aplicamos con los grupos de aficionados que están más coordinados y vinculados directamente a la Casa. Buscamos argumentar y se es estricto con las decisiones tomadas en colectivo. Lo agradece el trabajo. A los trabajadores podemos distinguirlos como creativos, alegres, responsables, humanos, apasionados, ocurrentes, sinceros, preocupados por los otros y solidarios, pero no siempre puntuales, y olvidadizos de planes de trabajos, evaluaciones y en general poco amigos “del papeleo”. Los puntos débiles son mayormente los problemas de recursos, la logística para el trabajo, que entre algunos existe un poco de rutina. La cuestión salario que fue caballo de batalla y punto débil por años ha mejorado a partir del aumento salarial del pasado julio. Ello los compromete aún más con la institución. Implica una exigencia mayor. En general los cuatro directivos coinciden en que la gente (su colectivo) creen que la Casa de Cultura es su casa, no por gusto el lema aceptado por el colectivo fue: La Casa de todos. Para la directora en ella esta gran parte de su vida y los otros sienten que el lugar no es solo el trabajo sino un apoyo a sus vidas, respiro a problemas cotidianos, hacer entre iguales y eso es lo que representa la Casa y por ello, en ella se sienten bien, satisfaciendo a los públicos internos/externos de la entidad. Para los aficionados la información que reciben es oportuna y suficiente, sobre todo en cuanto a cuestiones referidas a ensayos y actividades, normativas, reglas de la institución. Sienten que el Centro les brinda apoyo, reconocimiento y, a la vez, se preocupa por ellos y sus asuntos personales. La información es clara, actualizada y útil, en cantidades suficientes. Se recogen, en general, se escuchan, analizan sus sugerencias, opiniones o quejas como aficionados(as). Para alrededor del 70% la comunicación con la Casa es buena para un 25% es regular y un grupo pequeño no contesto a la pregunta. Definieron ambiente y clima muy buenos un por ciento similar de encuestados, aunque un grupo protestó ante incomprensiones con algunas de la compañera de servicios. La Casa es considerada por ellos como una familia, allí han encontrado un grupo de amigos, aunque cuando hay actividades es como una sala de emergencia, pero agradable ¡que locura! Amistad, alegría, satisfacción, orgullo, compromiso, compañía, sonrisa, desarrollo y sacrificio fueron las palabras priorizadas, aunque muchos no escribieron las palabras definitorias de la entidad. Otros utilizaron las mismas de la pregunta anterior: otra familia, un lugar agradable, la casa de todos y donde vengo a bailar están reiteradas. Lo anterior aparece refrendado por las opiniones de muchos familiares presentes en la realización de las encuestas. Muchos de ellos activos aficionados a partir de sus hijos, hijas o nietos. No los incluimos específicamente en el trabajo teniendo en cuenta que las opiniones de los familiares de los aficionados guardan mayor o menor relación con la edad de los mismos. No es lo mismo los padres, abuelos de un pionero que los de un/una adolescente, joven; persona mayor y muy diferente en el caso de los adultos mayores o discapacitados. A pesar de ser la encuesta de mayor longitud, los trabajadores la acogieron con entusiasmo, al igual que días antes habían asumido la referida a los valores. Participaron 43 de los 50 y consideraron en un 95%, suficiente la información recibida, algunos la valoraron como demasiada, pero en general fue considerada suficiente tanto en lo referido a actividades, planes, logros, estado de las reparaciones (7%) y a resultados económicos. Las informaciones, útiles casi siempre y con bastante actualidad, se reciben sistemáticamente y pueden llegar desde el jefe inmediato superior, la dirección o por otros trabajadores. El Sindicato y otras organizaciones solo orientan en las reuniones, los directores lo hacen de manera constante, ayudan a pensar. No aparecen la comunicación informal, el rumor y otras vías como fuentes de información. Lo que compartimos sirve para mejorar el trabajo (43 marcaciones), para reconocer resultados positivos (18 personas), quejarse (7 personas); orientar y señalar errores (32 marcaciones). Son informaciones de tarea, personales/humanas, de estímulo y normativas. Para un 39% se tienen en cuenta sugerencias, planteamientos, opiniones de los trabajadores y los aficionados. Se tiene en cuenta el apoyo de los superiores, en mucho. Las reuniones son útiles para un 57%, pero conversaciones y orientaciones directas de los directores son más útiles/efectivas (80%), los murales son para visitas y los de fuera (6%). Los rumores, al parecer, no tienen cabida en este lugar. Los 43 encuestados conocían el año de creación de la Casa, lo cual es lógico porque están conmemorando su cincuentenario, el cual celebraron “por todo lo alto”, el pasado 27 de septiembre con visitantes provinciales y nacionales y una serie de homenajes de diferentes instituciones. Nadie se podía olvidar. Con la misión la cuestión fue más delicada, pero, en general, declaran trabajar para asesorar y desarrollar el Movimiento de Artistas Aficionados, la Brigada José Martí y a la cultura popular tradicional en la comunidad. Expresado de diferentes maneras esta es la misión del centro así es que puede asumirse que 37 personas contestaron adecuadamente la pregunta. Les une a la Casa la preocupación por su persona, ser el lugar donde trabaja, la responsabilidad y confianza que siente allí, separándoles los problemas logísticos, cierta apatía que de vez en vez recorre el ambiente y algunos, que vienten de lugares centralizados, añoran hasta acostumbrarse el modo aparentemente disperso de su organización. Para 35 personas lo más importante de este lugar es el ambiente y las relaciones de trabajo, lo útil e importante de su hacer es lo segundo en importancia para 28 encuestados y para 19 el salario es esencial, porque sin él, arguyeron algunos de ellos, no funciona lo demás. Increíblemente, aunque los 43 encuestados se sienten identificados ¡y mucho! con la Casa, el 52% le atribuye importancia secundaria, primero hay que resolver otras necesidades mayores y después se alegra el espíritu, no es que no sea necesaria, ni importante, pero… Los trabajadores se definen como solidarios (35), respetuosos (31), alegres (25), responsables (19), sinceros (16) y trabajadores (14). Modesto y emprendedores a pesar de ser marcaciones positivas no fueron tomadas en cuenta, ni tampoco a indisciplina que si debería haber aparecido en alguna de las respuestas. Al indagar qué son los valores, el 97% de los trabajadores contestaron afirmativamente, que los conocían y se explicaron al respecto, uno dijo no conocer que eran valores y dos marcaron tener dudas al respecto. Asumen como valores de primer nivel los personales (56%), luego los sociales (23%) y los institucionales fueron asumidos solamente por tres encuestados (10%). Hay que hacer constar que muchos se refirieron al sistema o interconexión existentes en esta triada. Cuatro participantes dejaron la pregunta sin responder. Los valores más señalados fueron: la honestidad (90%) y el respeto (86%). Otros valores tenidos en cuenta son la solidaridad (63%), laboriosidad (50%) y patriotismo (26%). Muy a tono con su trabajo los técnicos y/o especialistas marcan además perseverancia (40%), profesionalidad (46%) altruismo (16%) y confianza en el grupo (2%). Esta pregunta fue respondida por todos los participantes. Al contrario, la siguiente pregunta fue la menos contestada (ocho participantes la dejaron en blanco). De las respuestas obtenidas se infiere que los valores referidos son primordiales y su conexión es sistémica, siendo base para convertirnos en mejores personas, más integrales. Desde ellos se irradian los restantes. En cuanto a los valores que deben primar en las relaciones interpersonales, de trabajo y comunicativas en la Casa, siguen siendo prioritarios honestidad y respeto, aunque solidaridad, disciplina, sentido de pertenencia y profesionalidad (46% respectivamente) se encuentran entre los cinco primeros. La austeridad solo alcanzó un cuatro por ciento de marcación por lo que consideramos que debe estar entre los que deben ser trabajados dentro de esta propuesta. Muchos de los encuestados piensan que este trabajo puede dar buenos resultados y que debería extenderse a los instructores de las escuelas, a los propios aficionados y sus familiares y al resto de las casas de cultura. Con un sistema de valores firme, adecuado, una comunicación interna envidiable y una mayor incidencia de su trabajo para públicos estratégicos y en los medios masivos de difusión municipales, llegó, en este 2019, la Casa de Cultura a celebrar su 50 aniversario. De la campaña que hiciera y como la ha llevado lo largo de este año de jubileo tratara La crónica de El cardenense en otra oportunidad. Bibliografía • Bombino Luis (2008) El saber ético de ayer y hoy. (Compilador y Coordinador) Editorial Félix Varela. La Habana. • Colectivo de autores (2003) Reflexiones en torno a la propaganda. Editorial feliz Varela. La Habana. • Confucio (1964): Páginas Escogidas. Editorial Losada. Buenos Aires, Argentina • Consejo Nacional de Casas de Cultura (2009) Revista Alas y raíces. Número 0 200. • García, Alina y Santos, Daniel: La casa de Todos: “Trabajo final de Comunicación organizacional Universidad de matanzas, curso 2015/2016) • Martínez, Lorena y Milagros, Gutiérrez (2014) Maestra de bailes: la historia de Olga Nordelo contada por sus danzas. Inédito. Trabajo Premio Provincial Escaramujo, 2015. • Martínez, Lorena y Vega, Lourdes La Casa de todos: Caracterización e historia de la Casa de Cultura Gonzalo Roig de Cárdenas. (2012) • Martínez, Lorena Tesis en opción al grado de Master en ciencias de la comunicación Lo más noble de ti. Facultad de Ciencias de la Comunicación Universidad de La Habana. (2006) • Martínez, Lorena: Diagnóstico de Comunicación de la casa de Abuelos del municipio Cárdenas. Monografía UMCC (2016/2017) • Martínez, Osvaldo (1990): VI Congreso de la UNEAC (discurso) En periódico Granma 10 de noviembre 1990. • Ubieta, Enrique: Cuba y los desafíos culturales del siglo XXI. Revista Cuba Socialista Número V, CCPCC (2009)


"De amar las glorias pasadas se sacan fuerzas para adquirir las glorias

nuevas".

José Martí



“… la HISTORIA NOS AYUDARÁ A DESCUBRIR LOS CAMINOS DE HOY Y DE MAÑANA, A MARCHAR POR ELLOS CON PASO FIRME Y CORAZON SERENO Y A MANTENER EN ALTO LA ESPERANZA (...)”.

RAMIRO GUERRA